La ciudad tradicional de Ibiza se divide en tres secciones bien delimitadas: Dalt Vila, la parte más alta, rodeada de muralla y presidida per el Castillo; la Penya, a los pies del baluarte de Santa Llúcia, sobre una entrada de tierra en el mar, el antiguo barrio de pescadores; y la Marina, antiguo arraval de la ciudad emmurallada, hoy el centro comercial de la ciudad y antesala del puerto. Modernamente se han añadido nuevos barrios siguiendo las carreteras de Sant Josep y Sant Antoni.

Los datos históricos que tenemos de Ibiza nos indican que fué fundada por los cartagineses, que se instalaron en la isla en el siglo VII a.C. Es por lo tanto una de las ciudades más antiguas de los actuales Países Catalanes, de los cuales forma parte desde la conquista de 1235, bajo el reinado de Jaime I.

Secularmente Ibiza ha sido una tierra pobre, de escasos recursos naturales. Las salinas, riqueza más importante de la isla, pasó a ser propiedad real de Felipe V de Borbón, vencedor de la Guerra de Sucesión (1705-1715), por lo cual la pobreza se hizo más intensa y general, sin que esto impidiera que el estado español la cargase de impuestos y dispusiera según su conveniencia. Así lo expresa esta canción popular:

En esta isla tan pobre,

los que la van gobernando,

cortan por donde quieren

y se quedan la mejor parte,

y en Madrid hacen grandes fiestas

con lo que se va recaudando,

todo son coches y carrozas,

diputados y generales,

y el que nace pobre que se muera

sin un día de descanso

Hoy en dia, con la dedicación exclusiva al turismo, Ibiza ha conseguido una renda de las más altas del estado y se ha convertido en tierra de inmigración, a cambio, sin embargo, de una destrucción masiva de sus bellezas naturales.